Necesitamos a los guerreros
Escudriñando y no los encuentro
aquellos hombres que luchaban
aquellos hombres que por una idea
rugían y se entregaban.
De su heroísmo y valor…
desgraciadamente ya no queda nada
ahora solo quedan farsantes
y es que me resultan insoportables
esos revolucionarios de salón
esos progres de boquilla
esos luchadores de pacotilla
que obedecen a los que mandan
hacen revoluciones de risa
y tienen el banco solo de asiento
esos que se llenan la boca
de altisonantes palabras
y que por dinero serían capaces
de venderle al diablo el alma
esos que juran en arameo
por los derechos humanos
y tienen limpiándo la casa
a una extranjera sin papeles
a la que pagan un salario de esclava
esos que gritan a los cuatro vientos
a favor de la lucha obrera
y luego se humillan en el mandato
a cambio de que les suban la paga
…a cambio de que le suban la nota
esos ridículos monigotes de paja
que no tienen vergüenza
ni tampoco dignidad
aquellos que hablan y hablan del Che
como un ejemplo a seguir
mientras ven las guerras
tumbados en su sofá de piel
a través del televisor de plasma
aquellos que están a favor siempre
de todo lo políticamente correcto
que opinan lo que dice la manada
aquellos que con grandes aspavientos
se solidarizan con mil causas
y luego acaban como cerdos
pagando “señoritas” en las saunas
aquellos que con palabras de Judas
se compadecen de los pobres
y luego invierten su dinero
en suculentos fondos de inversión
y en cremas para reducir la papad;
líquidos para quitarse el dejo
aquellos farsantes que no son otra cosa
que una píara de BURgueses frustrados
o quizá indígenas vendidos
que sin la más mínima vergüenza
se quejan de las injusticias sociales
tras devorar una riquísima mariscada
esos que cuando huelen el peligro
se ocultan rápido debajo de las sábanas
lloran asustados como roedores
y sin mirar a los ojos al enemigo
de rodillas y temblando
enarbolan la bandera blanca
quizás mejor que los guerreros
desde donde estén no vean nada
que no sepan jamás
que todo lo que lucharon
que toda su sangre derramada
se la bebieron estos señores
y no sirvió absolutamente para nada.
